
miércoles, 23 de noviembre de 2011
Se realizó mesa redonda sobre Czesław Milosz

martes, 15 de noviembre de 2011
Mesa redonda sobre Czesław Miłosz en Lima
Lunes 21 de noviembre a las 7:30PM
Sala de Oficina Central: Av. Angamos Oeste 120
Al finalizar se ofrecerá un vino de honor.
martes, 25 de octubre de 2011
Alejandra Málaga Sabogal en "Don Juan Tenorio"

La joven actriz Alejandra Málaga Sabogal representa el papel femenino principal, el de doña Inés. Alejandra se crió entre Polonia, su lugar de nacimiento, adonde vivió hasta los ocho años de edad y Cusco de donde a los quince años llegó a Lima. Algunos poemas suyos salieron publicados en la antología Poesía, Perú s. XXI, (Lima, Fundación Yacana, 2007). Hace algunos años publicamos un poema suyo en este blog.
domingo, 18 de septiembre de 2011
Se presentó el libro "En otra piel" de Gabriela Cuba

lunes, 15 de agosto de 2011
O rzeczach na ziemi...
Gustaw Meynrik
sábado, 13 de agosto de 2011
O nadawaniu sensu przeszłości
martes, 2 de agosto de 2011
Komentarz odnośnie śmierci dwóch polskich franciszkanów w Pariacoto w 1991r.
domingo, 22 de mayo de 2011
Sobre las sospechas

Habían llegado al final del pasillo y, con lágrimas de vergüenza, Catherine huyó corriendo a su habitación.
Jane Austen: "La abadía de Northanger"
martes, 10 de mayo de 2011
Yo sabía que te hallabas...
Yo sabía que te hallabas tras la entrebruma del sueño y la poesía, y sin embargo, no sabía como llamarte, para atraerte hacia mí. Todo, todo lo pasado y lo vivido se confundía con los sueños, cual un espejo roto en el que el mundo se mirara destrozado. Cual esa sensación temible y aterradora de avanzar por un desierto sin fin, para encontrarnos a nosotros mismos cara a cara, como ante un espejo invisible. Como si la expresión “Lo monstruoso también forma parte de lo humano” que dijera cierta vez un poeta, se volviera realidad.
Yo sabía que te hallabas tras la entrebruma del sueño y la poesía, de los párpados a medio cerrar, y sin embargo, no sabía como llamarte, como atraerte hacia mí. Yo sabía que te amaba tras esa entrebruma del sueño y la poesía, y sin embargo, no sabía como decírtelo, como expresarte la inmensidad de ese amor. Yo sabía tantas cosas, pero a la vez no las sabía, por hallarse todas en el límite entre el sueño y la vigilia, tras los párpados a medio cerrar, donde todo es comprensible, pero nada es expresable en el lenguaje cotidiano.
Yo sabía que te hallabas tras la entrebruma del sueño y la poesía, pero a la vez no lo sabía, ni quería saber nada. ¿Era que tal vez ese saber formaba parte de la memoria eternal, guardada desde siempre en nuestras células, por la que navegaran miles y millones de seres amorfos, de larvas y humus y creaciones extrañas, ajenas a nosotros?
Isabel Sabogal