Ahora que he recuperado algo de mis fuerzas voy recorriendo mi ciudad de a pocas, como si la reconociera, como si la palpara con mis pies al caminar. Como si, y ésta es una sensación que no me puedo quitar de encima, me fuera despidiendo de ella nuevamente, cuando siento que aún no he acabado de llegar del todo...
...Pisar el suelo es extraordinario,
pero acariciar el suelo, caminando, es mucho más...
Juan Ramírez Ruiz
Lima, San Isidro, cuatro de febrero del 2008
...Pisar el suelo es extraordinario,
pero acariciar el suelo, caminando, es mucho más...
Juan Ramírez Ruiz
Lima, San Isidro, cuatro de febrero del 2008
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