domingo, 29 de julio de 2018

La novela "Un Universo dividido" en la ANTIFIL


Estimados lectores, informo por la presente, que mi novela "Un Universo dividido" está a la venta en el puesto de ACUEDI en la Feria Alternativa del Libro ANTIFIL en Lima. La cita es en la Avenida Alfonso Ugarte 1398, Breña, (al frente de la estación España del Metropolitano) hasta hoy, 29 de julio a las 10 de la noche.

viernes, 20 de julio de 2018

Sobre los "Relatos bizarros" de Olga Tokarczuk

Esta será una breve reseña de  mi última lectura, los "Relatos bizarros" de Olga Tokarczuk. Pero la palabra "reseña" es meramente convencional, pues estos relatos son realmente tan, pero tan bizarros, que simplemente irreseñables e irresumibles. Tampoco se les puede poner una etiqueta en común, pues tratan temas tanto, valga la redundancia, bizarros como diversos. Desde ya advierto que, si bien mencionaré a todos, tan sólo comentaré algunos de los relatos de este volumen.
Entre ellos, hay los que podrían ser calificados de relatos de ciencia ficción. En ellos la autora toca tales temas como, entre otros, la catástrofe ecológica, la clonación, y/o los límites éticos frente al avance de la tecnología.

Pero de éstos, tan sólo "La visita", podría ser definido como un cuento de ciencia ficción clásico. Con personajes, de los cuales nos enteramos tardíamente, que no son humanos, sino, por así decirlo, humanoides.

"El calendario de las fiestas humanas" sucede en un futuro hipotético, luego de una catástrofe ecológica mundial. La culminación de ésta se dio, cuando las bacterias "plastívoras" o devoradoras de plástico, vale decir, cuando las bacterias modificadas genéticamente para limpiar los mares de la contaminación, subieran a tierra firme a comerse también todo el plástico de allí. Al comerse, no sólo los objetos hechos de plástico, sino también las uniones de plástico de diferentes aparatos, destruyeron gran parte de la productividad humana. Como dice la cita: "cuando la catástrofe con el plástico destruyó, no sólo las casas, hospitales y fábricas, sino que cuestionó también algunos conceptos. La obra de destrucción, la completó la guerra. Cuando caían los satélites, parecían misiles, cual cuchillos lanzados a la Tierra".* Sin embargo, no se trata de un relato de ciencia ficción clásico, pues describe una sociedad que gira en base a rituales relacionados con el paso de las estaciones, con alusiones, a mi entender, a tradiciones de la antigüedad griega, egipcia, y tal vez alguna otra más que se me ha escapado.

En "Transfugio" los seres humanos pueden solicitar cambiar de especie. Como convertirse en un animal concreto. Como se trata de un cambio irreversible, deben resolver la parte legal antes, firmando poderes a favor de su persona de mayor confianza. Todo esto hábilmente dirigido por una empresa especializada en el tema.

El "Cerro de todos los santos" es de género un tanto indefinible. Se desarrolla como un relato de misterio, con un toque de ciencia ficción, que se revela al final. El hecho de que suceda, en gran parte, en un convento de monjas, y que se hable de vidas de santos, le da un toque específico, con alusiones al "Nombre de la rosa" de Umberto Eco. Como ejemplo que valga esta cita, referente al santo, cuyas reliquias se encuentra en el convento en cuestión: 
"San Auxencio mártir, fue entrenador de los leones, que en tiempos de Nerón, eran alimentados con carne de cristianos. Cierta noche uno de los leones le habló en lenguaje humano. Era la voz del mismísimo Jesucristo. No está escrito qué fue lo que le dijo el león con la voz de Cristo, pero al amanecer Auxencio ya se había convertido al cristianismo. Liberó a los leones en un bosque fuera de la ciudad, y él mismo fue prendido. El verdugo se convirtió en víctima".**

En cuanto a "Los niños verdes", es un relato de corte fantástico, escrito en un lenguaje arcaico. El narrador de la historia es el médico escocés William Davisson, quien llegó desde el lejano París a curar los males de Juan Casimiro Vasa, quien fuera rey de la República de las Dos Naciones (Polonia y Lituania) en el siglo XVII. Asombrado ante lo que ve, el narrador dice: "Al comienzo me extrañaba aquella atención hacia la Madre Divina. A menudo tenía la sensación de que ellos aquí, adoran a alguna deidad pagana y que - cosa que espero no me sea considerada como blasfemia - el mismísimo Dios y su Hijo, llevan humildemente los cintos en el cortejo de María".*** En medio del relato aparecen dos niños de color verde. Esto sucede en la propiedad del Sr. Hajdamowicz, en la que se queda varado el narrador, sin poder seguir al séquito real. El niño muere, y la niña se dedica a contarle a los niños del lugar, como es el mundo lunar en medio del bosque, del cual procede. Al final de la historia, la niña verde desaparece con todos los niños y el ayudante del médico, a quien éste tenía la esperanza de legar su sabiduría.

Aparte, entre los relatos de corte fantástico podemos mencionar también a "El pasajero""Las costuras".
En cambio "Las conservas", "Una historia verdadera" y "El corazón" son, a mi entender, de género totalmente indefinible.

"El corazón" trata de un hombre, quien después de un transplante al corazón, no vuelve a ser el mismo. No puede ni dormir, ni pensar en otra cosa que no sea en quién fue la persona, cuyo corazón lleva dentro de su cuerpo. Esta obsesión se convierte en un llamado, que lo lleva a visitar lugares que jamás imaginó conocer. En el relato se habla de la tradición budista y de la rueda de encarnaciones.

En cuanto a "Una historia verdadera" podría parecer una historia fantástica, pero a mi modo de ver, no lo es. Habiendo vivido en diferentes lugares y sabiendo algo de astrología, sé que la situación social de una persona puede variar radicalmente, dependiendo del lugar en el que ésta se encuentre. El personaje principal es un catedrático, que ha llegado a dictar una conferencia, a un país, cuya lengua y costumbres desconoce. Es éste un tema recurrente en la obra de Tokarczuk, ya que también está presente en el relato "El profesor Andrews en Varsovia", que forma parte del libro "Concierto de varios tambores".

Con esta leve pincelada espero haber despertado en el lector hispano, la curiosidad frente a un libro de géneros entremezclados. Si bien éste, como muchos de los libros que reseño, no ha sido aún traducido al castellano.

* Olga Tokarczuk: "Relatos bizarros", p. 212
** Op. cit., p. 193
*** Op. cit., p. 18
Traducción: Isabel Sabogal Dunin-Borkowski

Ficha bibliográfica:
Olga Tokarczuk: "Relatos bizarros" (Opowiadania bizarne)
Cracovia, Wydawnictwo Literackie (Editorial Literaria), 2018
Número de páginas: 256 
Idioma: Polaco

sábado, 14 de julio de 2018

Sobre la novela "E.E." de Olga Tokarczuk

Esta será una breve reseña de la novela „E.E.” de Olga Tokarczuk. El título viene de las iniciales de Erna Eltzner, personaje principal de la misma.
¿Pero quién era Erna Eltzner? ¿Una muchachita adolescente, a través de cuya boca y cuerpo se manifestaban los fantasmas? El espíritu del Sr. Schatzmann, quien nunca llegó a decirle a su esposa, ni en vida, ni durante las sesiones de espiritismo, donde había escondido la plata. El espíritu de "Koloman", quien anunció el terremoto en Mesina en el sur de Italia en 1908, así como el fin del mundo en 1914. El espíritu de "Pola", quien hablara en un lenguaje obsceno, impropio de una niña de buena familia, como lo era Erna. El espíritu de su abuelo materno, el Sr. Przybylski, a quien nunca llegó a conocer.
También estaban los personajes de carne y hueso como Walter Frommer, quien dirigía las sesiones de espiritismo y estaba perdidamente enamorado de la Sra. Eltzner, madre de Erna y de sus varios hermanos y hermanas. Frommer trabajaba en el Registro Civil, adonde aparte de elaborar las partidas de defunción, inscribía las características de los occisos, tales como sexo, edad, lugar de nacimiento o causa de la muerte en su rúbrica respectiva, según un modelo que él mismo había elaborado. Además, y ya para su uso personal, anotaba los tránsitos de la Luna y Saturno en el momento del deceso, trabajo que esperaba poder publicar algún día.
Lo acompañaba su hermana Teresa, soltera como él, quien era jorobada. El don de la mediumnidad, que tuvo de adolescente, la había abandonado hacía tiempo. Sin embargo, cosa que no se atrevía a confesarle a Walter, al quedarse sola al anochecer, venía a acompañarla su madre, muerta cuando eran niños aún.
Estaba el Doctor Löwe, médico de cabecera de la familia. Fue él quien condujo a Artur Schatzmann, hijo de la señora del mismo apellido, adonde el Doctor Vogel. Artur era un joven estudiante de medicina, interesado en entender "científicamente" el caso de Erna Eltzner. Vogel fue el primero en hablarle sobre Freud y el psicoanálisis, y sobre el papel del inconsciente en nuestras vidas. Asimismo le puso a disposición su biblioteca, de la cual Artur escogió, para empezar, los libros de Charcot y Janet sobre la hipnosis.
" - La conciencia no ha alcanzado aún su continuidad" - le dijo Vogel en alguno de los múltiples encuentros, que tuvieron posteriormente - "Es por eso que todos los intentos por fijar reglas de vida sobre bases racionales acaban en un fracaso." *
A raíz de esos encuentros Artur le pidió a Erna, que lleve un cuaderno de bitácora de sus sueños. Cosa que Erna cumplió al detalle, pues estaba enamorada de él en secreto. Asimismo Artur logró convencer a la Sra. Eltzner, vía el Dr. Löwe, a que acceda llevar a Erna al laboratorio de la Universidad para hacerle una medición eléctrica del cerebro. Erna parecía divertida con el tema, pero su madre se sintió muy consternada  por el hecho de que analizaran a su hija en el Departamento de Zoología, donde se analizaba también a los animales. Y es que Artur estaba recopilando material para el caso "E. E." (por las iniciales de Erna Eltzner), como él mismo lo denominó, para su tesis doctoral, cosa que finalmente logró llevar a cabo. 
Pero Erna se sentía cada vez más agotada con las sesiones mensuales y esa situación que no había buscado. A instancias de su madre, dejó de asistir a la Escuela de Arte Industrial y recibía, dos veces por semana, "clases" de Frommer, quien le hablaba de los médiums más famosos de la historia, la transmigración de las almas, la reencarnación y nuestra vida después de la muerte. Pero éste llegó a percatarse de que la chica, con la mirada ida, ni siquiera le prestaba atención.
Llegaron luego las vacaciones escolares, y la señora Eltzner viajó con sus hijos a la propiedad de su cuñada, la hermana del señor Eltzner, en el campo. La interrupción de las sesiones, así como el aire puro, hicieron que Erna se repusiera físicamente. Durante esas vacaciones le vino la primera regla y Erna, tal cual alguna vez Teresa Frommer, perdió sus poderes mediúmnicos.
Ya de vuelta a la ciudad, en la siguiente sesión, Erna apenas respondía. Y encima salió a relucir, que sus hermanas menores, las mellizas, con el afán de ayudarla, habían puesto pitas en la sala, que una de ellas jalaba durante las sesiones, para que se cayeran las cosas. Cabe anotar que lo hicieron sin su anuencia. Lo cierto es que Erna sí tenía poderes kinestésicos, pero no sabía como controlarlos.
Se armó el escándalo y Frommer, quien le había puesto alma, corazón y vida al asunto, cayó en una depresión profunda. Lo sacó de ella el doctor Löwe, quien vino a visitarlo y lo llevó a pasear. Fue durante ese paseo que el doctor adquirió una neumonía, que lo llevó al otro mundo. Estando en su lecho de muerte, el doctor anheló morir para siempre, y se llenó de pavor, al no tener la certeza de si eso era lo que lo esperaba. Tal como dice la novela:  „Comprendió que Dios se destruyó a sí mismo mediante una explosión inmensa, que el tiempo era la medida de su desintegración, y que todos nosotros somos fragmentos del cuerpo divino, que siguen muriendo, como todo alrededor. Nuestra salvación es la inexistencia”.**
La novela finaliza con Artur Schatzmann yendo a la sombrerería, de la cual Erna era dueña, a despedirse de ella, antes de partir a la guerra. Pero Erna no lo reconoce. Artur le habla entonces de las sesiones de espiritismo unos años atrás. Algo similar a una sombra cruza el rostro de ésta, antes de decirle que no sabe de qué le está hablando y pedirle que se vaya.
Corría el año 1914, el año pronosticado por "Koloman" como el del fin del mundo. Y efectivamente, después de la guerra que estalló aquel año, la Primera Guerra Mundial,  ni Europa, ni sus regiones aledañas, volvieron a ser las mismas. El mundo, descrito tan magistralmente en la novela mencionada, inició su camino hacia la desaparición absoluta.
Todo esto sucedía en la ciudad de Breslau, cuando ésta todavía pertenecía a Alemania, y los apellidos de los personajes principales son alemanes. Vogel significa pájaro, Löwe -  león, y Schatz - la raíz de Schatzmann - querido o tesorito, dicho de cariño. ¿Tal vez habría que buscar alguna clave en el significado de los mismos? Frommer significa devoto, y efectivamente, Frommer se aproximaba al tema de la mediumnidad con una devoción absoluta, cual si de una religión se tratara.

Recordemos que la autora es psicóloga de profesión y que ejerció como tal, trabajando como psicoterapeuta en la clínica de salud mental de Walbrzych. En el libro hace alarde de su conocimiento en la materia. Sin embargo, nos quedamos con la duda de si lo que nos presenta es una burla, una mirada levemente irónica, o una reflexión sobre los límites del estudio de la psique humana.

* Olga Tokarczuk: "E. E.", p. 154
** Op. cit., p. 263
Traducción: Isabel Sabogal Dunin-Borkowski 

Ficha bibliográfica:
Olga Tokarczuk: "E. E."
Cracovia, Wydawnictwo Literackie (Editorial Literaria), 2017
Número de páginas: 267 
Idioma: Polaco

domingo, 8 de julio de 2018

El libro "Agricultura tradicional yunga" a la venta en Lima


Comunico por la presente que el libro "Agricultura tradicional yunga" de autoría de mi padre, José Rodolfo Sabogal Wiesse, (Lima, Sociedad Geográfica de Lima, 2017), se encuentra a la venta en el local de la:

SOCIEDAD GEOGRÁFICA DE LIMA
Jr. Puno 450, Lima 1 - Perú
Teléfono: (+51) 426-9930
Horario de Atención: Lun-Vie: 09.00-17.00

Precio: 45 soles la unidad

viernes, 29 de junio de 2018

Sobre la novela "Evna" de Siri Pettersen

Esta será una breve reseña de la novela "Evna" de Siri Pettersen, la tercera y última de la saga "Los anillos del cuervo"
Al igual que en "La putrefacción", la segunda novela de la saga, que comentamos anteriormenteHirka, luego de haber atravesado el umbral entre los mundos, se encuentra de pronto en un universo extraño, cuyas reglas absolutamente desconoce. Con la salvedad de que aquí sí hay alguien que ha venido a recibirla al lugar adonde llega. Se trata de la umpiri Skerri, quien tiene el encargo de saludarla y de propiciar que aprenda los rudimentos del idioma y las costumbres del lugar durante la travesía de varios días hacia Ginnungad, la capital de ese mundo.  Para ello llega al segundo día la lingüista Oni, políglota por naturaleza, a quien dos años atrás habían encargado que aprendiera la lengua de Ym. Ahora entiende el porqué. 
Se trata de una sociedad, rígidamente dividida en castas, cuya jerarquía vamos conociendo parcialmente a través de los ojos de Hirka. La casta más alta es la de los dreyri, los de la primera sangre, a la que Hirka pertenece. Esta casta está conformada por varias casas familiares de jerarquía mutable entre sí, como veremos más adelante. Y estos linajes son las que conforman el Concejo que gobierna Dreysíl, el mundo de los umpiri. Hirka pertenece a la Casa de Modrasme.
Están los sirvientes, a cuya casta pertenece Oni. Están los miserables que no tienen casa. Y muchos grupos intermedios más.
Y está el grupo social más bajo, el de los kwessar, los caídos, quienes llevan una señal marcada en la frente. Uno de ellos es Keskolail, a quien Hirka salva de la muerte y de quien se hace amiga. Y se les llama caídos, porque no lo son de nacimiento, sino porque han caído a ese estado por un delito cometido. Con la salvedad de que la palabra "delito" tiene una acepción bastante particular entre los umpiri.
En Dreysíl están además los Videntes. No uno, sino varios, a diferencia de Ym. Uno de ellos, ser extraño, semiumpiri y semicuervo, se convierte en el maestro de Hirka.
Llegando a Ginnungad, ciudad situada en el cráter de un volcán, Hirka conoce a su familia.  A su abuelo Raun, a su abuela Uhere, a Modrasme, la matriarca del clan, quien tiene ya más de tres mil años, y a algunos parientes más. Quien más se alegra de su llegada es el abuelo, feliz de tener a quien transmitirle sus conocimientos, por ejemplo, respecto a la lucha con palos, deporte practicado con asiduidad por los umpiri. A través de él, Hirka se entera, de que Skerri fue novia de su padre, Graal. Que parecían estar hechos el uno para el otro, y que después de que Graal quedara desterrado de por siempre en el mundo de los humanos, Skerri no estuvo ya con nadie más. La existencia misma de Hirka le duele en lo más profundo del ser, pues es la prueba palpable de que en cambio, Graal sí estuvo con alguna hermosa humana. Es por eso que la maltrata y la insulta, llamándola despectivamente gweni, nombre con el cual los umpiri designan a todas las hembras no umpiri del universo, sean éstas humanas, aetling o animales. El abuelo también está feliz, porque Hirka resarce a la familia, la cual había caído en la ignominia, al tener a un hijo traidor - Naiell, un hijo desterrado - Graal, y ningún descendiente más. Y es que los umpiri tienen mucha dificultad para concebir. 
El clan de los Modrasme ha esperado pacientemente mil años, hasta la llegada de Hirka y su presentación a la Casa de Hod, para poder volver a remontar. Ella, desde su llegada, ha sido instruida para presentarse como Hirka, hija de Graal, hijo de Raun de la Casa de Modrasme, la trigésimo tercera, y como tal, es aceptada por la Casa de Hod. En consecuencia la Casa de Modrasme asciende a ser la séptima en jerarquía en el Concejo de los umpiri
Y eso que Hirka es tan sólo medio umpiri, lo cual se nota en su aspecto de humana. No tiene garras, sus caninos no son tan filudos ni sobresalen, y sus ojos tienen iris y pupila, no son una masa blanca o negra como los de los umpiri, lo cual hizo que los aetling les pusieran el sobrenombre de ciegos. Físicamente ha heredado tan sólo el color rojizo del cabello de su abuelo Raun. Pero tiene otras capacidades, como la de reconocer los tipos de seres con el olfato, o saber de antemano si alguien morirá o no. Y su sangre, como ya comentamos anteriormente, tiene poder curativo.
Simultáneamente nos vamos enterando, de lo que mientras tanto sucede en las comarcas de Ym, vale decir, en el mundo de los aetling. Garm Darkdaggar, uno de los miembros del Concejo, hace asesinar a sus opositores y envenena al grupo de guerreros, llamado las Sombras Oscuras. Sin embargo, cuarenta de ellos sobreviven. Uno de los sobrevivientes es Rime, el amado de Hirka, quien se hace cargo del grupo, reemplazando a Orja, quien murió envenenada.
Hacia el final de la novela, Hirka atraviesa el portal que divide ambos mundos, liderando a los umpiri, quienes en alianza con Rime y Eirik, se enfrentan y derrotan a Garm Darkdaggar, el usurpador. Eirik es el rey de la Corte de Cuervos en las comarcas de Ym. A cambio Eirik permite que los kwessar y los sin casa habiten en sus tierras como seres libres. Así que la profecía de la primera novela de la saga se cumple. Hirka, la hija de Odín, ha abierto las puertas para que los nárbyrn, umpiri o ciegos a la tierra, entren a las comarcas de Ym. Pero éstos ya dejaron de ser ciegos. Hirka ha logrado curar los ramales de Evna, la energía primordial, que ahora llega hasta Dreysíl, y que los umpiri desde hacía mil años, esperaban recuperar. 
Hirka ya conoce los tres mundos, el de los humanos, los aetling y los umpiri. Pero gracias a un mapa de los mundos, del que se hizo poseedora, sabe que hay muchos mundos más. Sabe también, que por su naturaleza, será siempre ajena a cualquiera de estos mismos. Sabe que su destino es estar en continuo movimiento entre los mundos, llevando lo mejor de un mundo a otro. Y como además, ha logrado la capacidad de convertirse en cuervo y de luego, retomar su forma humana, puede pasar desapercibida con mayor facilidad.
La novela finaliza con Hirka, acompañada de Rime, lanzándose al espacio entre los mundos.

Isabel Sabogal Dunin-Borkowski

Ficha bibliográfica:
Siri Pettersen: "Evna"

Saga: "Los anillos del cuervo" (Krucze pierścienie)
Traducción del noruego al polaco: Anna Krochmal y Robert Kędzierski
Poznań, Editorial Rebis, 2016

Número de páginas: 528

viernes, 15 de junio de 2018

Sobre la novela "La putrefacción" de Siri Pettersen

Reseñaremos aquí la novela "La putrefacción", segundo libro de la saga "Los anillos del cuervo" de Siri Pettersen. La novela "La hija de Odín", el primer libro de la misma, que comentamos en la entrada anterior, finalizó con Hirka, el personaje principal, cruzando el umbral hacia el mundo de los humanos, mundo al que supuestamente pertenece.
Es así como Hirka llega a la ciudad de York en Inglaterra, sin tener ni la más remota idea de adonde ha llegado. A un mundo poblado de carros, ascensores, teléfonos celulares, aviones y demás. Debe aprender para que sirven todas esas cosas, así como debe aprender el inglés, ya que allí nadie comprende el idioma de Ym, ni sabe siquiera de la existencia del mundo del que ha llegado. 
En medio de su incertidumbre la acoge el padre Brody, quien aunque sabe que no tiene ningún documento de identidad, se apiada de ella, y le permite refugiarse con Kuro, cuervo con el que Hirka cruzó el umbral, en los altos del campanario de la iglesia. Además le da una propina a cambio de trabajos menudos que Hirka hace para él, como lavar la vajilla y hacer las compras. Pronto aparece una mujer del servicio social a preguntar por ella y Hirka sabe que debe escapar. 
Pero antes de que lo logre aparecen otros seres que la buscan, quienes están a servicio de Graal, poderoso nárbyrn, que habita entre los humanos. Los ciegos o nárbyrn son llamados umpiri en su propio idioma. Umpiri significa aquel que habla la lengua verdadera. 
La trama se va complicando cada vez más. Aparece Stefan Bamore, joven humano, cazador de los siervos de estos seres, a los que él llama los olvidados. Resulta además que en el cuerpo de Kuro, habitaba Naiell, el así llamado vidente por los pobladores de Ym. Naiell es hermano de Grall, con quien había librado la guerra por las comarcas de Ym hacía mil años. Y es que los umpiri son quasi inmortales, mueren "jóvenes" sólo si alguien los mata, y empiezan a envejecer luego de miles de años de existencia. Ambos hermanos pertenecen a la casta de los dreyri. Dreyri significa los primeros o los de la primera sangre, pues estaban, antes que los demás seres, en el Universo. Y quienes, por eso mismo, desprecian a los demás. Tanto a los aetling y los humanos, cuya vida es efímera, como la de un insecto, que vive un solo día, como a los que, siendo de su Universo, no pertenecen a su casta. Tienen además una regla que nunca quiebran: un dreyri no mata directamente a otro dreyri
Hirka, Naiell y Stefan conforman un trío particular, enfrentando juntos las vicisitudes que se presentan en el camino. Hasta que Hirka se entera de que Graal es su padre y se entrevista personalmente con él. Hirka es pues una mezcla de humana y de umpiri, los dos seres más depreciables para los aetling, habitantes del mundo en el que se ha criado. Pero asimismo pertenece a la casta de los dreyri, y su sangre tiene poder curativo. Se entera también de que todo lo que le enseñaron sobre El vidente era mentira, quien lo único que quería era nutrirse de Evna, la energía de la tierra, para ser adorado como un dios por los habitantes de Ym.
La novela, al igual que la anterior, finaliza con Hirka cruzando el umbral entre dos mundos. Pero en este caso se trata del mundo de los humanos y el mundo de los umpiri. Lleva consigo en ofrenda el corazón de Naiell, quien por encargo de Graal, ha sido ajusticiado.
Ésta más que una reseña ha sido en realidad una pincelada, de un libro de más de quinientas páginas, con muchas otras historias entrelazadas en su trama, y cuya lectura recomendamos a los amantes de la literatura fantástica.

Ficha bibliográfica:
Siri Pettersen: "La putrefacción" (Zgnilizna)
Saga: "Los anillos del cuervo" (Krucze pierścienie)
Traducción del noruego al polaco: Anna Krochmal y Robert Kędzierski
Poznań, Editorial Rebis, 2016
Número de páginas: 527

jueves, 7 de junio de 2018

Sobre la novela "La hija de Odín" de Siri Pettersen

Presentamos aquí una reseña de la novela "La hija de Odín" de Siri Pettersen. Se trata de la primera parte de la trilogía „Los anillos del cuervo" de esta joven autora, ganadora de los premios literarios „Fabelprisen” y „Sproing” para autores debutantes en idioma noruego. 
Se trata de una novela extrañísima, enmarcada dentro de un universo alucinante. El personaje principal es Hirka, la „sin cola”, personaje singular en un mundo en el que los aetling, quienes pueblan esas tierras, tienen cola. Aparte de tener cola, todos ellos tienen la capacidad de captar a Evna, la energía de la tierra. Capacidad cuya magnitud se verifica en un ritual de mucha importancia, el que se realiza una vez al año y que comprende a los jóvenes que han cumplido los quince años, llamados allí los quince inviernos. Los humanos, llamados despectivamente embling, son considerados seres despreciables, tanto por no tener cola, como por no poder captar a Evna y llenarse de ella. Quien esté con un embling, se irá pudriendo por dentro, por lo que también son llamados la putrefacción. Pero son despreciables sobre todo, porque su presencia abre las puertas a los nárbyrn, los nacidos muertos, los ciegos a la tierra, llamados simplemente los ciegos. Sin embargo, tanto los humanos, como los ciegos, son más un mito que una realidad, porque desde hace mil años nadie los ha visto.
Cuando Hirka llega a la edad de presentarse al ritual, su padre le confiesa, que en realidad no es su padre. Que la halló de pocos días de nacida, abandonada encima de una piedra, en medio de la nieve. Que se apiadó de ella y le hizo una herida, imitando la huella de la mordedura de una bestia, en el coxis, para hacerle creer, tanto a ella, como a los demás, que había nacido con cola, pero que se la habían llevado los lobos. En memoria de eso Hirka lleva un diente lobuno colgado del cuello. Que por lo tanto no puede presentarse al ritual, pues si descubren que, siendo humana, no puede nutrirse de Evna, pueden incluso quemarla en la hoguera.
Este es tan sólo el comienzo de una novela de más de seiscientas páginas, en la que hay muchos elementos más. Como los cuervos, considerados como animales sagrados, pues fue un cuervo, llamado El vidente, el que hace mil años salvó a los aetling de la invasión de los ciegos, que acabarían destruyendo la vida en las once comarcas de Ym. Ya que ése es el nombre del mundo en el que vive Hirka. Como las Sombras Oscuras, brazo armado del poder, quienes asesinan sigilosamente a los enemigos de éste. Como Rime, joven perteneciente a uno de los doce linajes del Concejo que gobierna las once comarcas, quien está perdidamente enamorado de Hirka, así como ella de él. Pero ambos saben que su amor es un amor imposible, puesto que, como ya dijimos, quien llegue a llegue a tener relación carnal con un embling, se irá pudriendo por dentro.
Lo cierto es que, luego de mil años, los ciegos, crueles humanoides con garras en vez de manos, quienes matan sin dejar rastros de sangre, reaparecen. 
La novela finaliza con Hirka cruzando el portal de piedra que separa los dos mundos. El  mundo de Ym, único mundo que conoce, y el de los humanos, al que supuestamente pertenece.
He leído este libro en su traducción del noruego al polaco, y entiendo que ha sido traducido  a algunos idiomas más, entre ellos el portugués, pero no al castellano. En todo caso recomiendo su lectura a los amantes de la literatura fantástica que dominen alguno de los idiomas, al que ha sido traducido.

Ficha bibliográfica:
Siri Pettersen: "La hija de Odín" (Dziecko Odyna)

Saga: "Los anillos del cuervo" (Krucze pierścienie)
Traducción del noruego al polaco: Anna Krochmal y Robert Kędzierski
Poznań, Editorial Rebis, 2016

Número de páginas: 647

viernes, 25 de mayo de 2018

El cambio de calendario en "La última del linaje" de Paweł Jasienica

En las dos últimas entradas de este blog nos hemos centrado en la historia de la  dinastía Jagellón, la cual a su vez, es parte de la historia de Polonia. En las mismas tenemos la explicación de quién es quién en la trama narrada, por lo que, recomiendo al lector, si es que aún no lo ha hecho, leerlas previamente a la ésta, pues no nos repetiremos. Acá seguiremos comentando el libro "La última del linaje" de Paweł Jasienica.
El 13 de febrero de 1582, el papa Gregorio XIII, introdujo el nuevo calendario, llamado por lo mismo gregoriano. Es el calendario, según el cual nos regimos actualmente. Durante los dieciséis siglos anteriores había regido el calendario juliano, introducido por el Emperador romano Julio César.
Aquí algunos comentarios del autor sobre el impacto que tuvo ese cambio en la República de las Dos Naciones (Polonia y Lituania). Nos cuenta, por ejemplo, que en Riga se persiguió y ajustició a quienes se opusieron a la reforma del calendario. Que en Lwów el arzobispo Solikowski ordenó se cerrara una iglesia griegocatólica, en la que se celebraba la Navidad según, la así llamada,costumbre anterior, vale decir según el calendario juliano, y dispersara a los fieles. Al enterarse de eso, el rey Esteban Batory prohibió que se persiguiera a quienes se rigieran según el calendario anterior. Quien propiciaba las persecuciones había sido su esposa, la reina Ana Jagellón.
Batory reinó sólo diez años en Polonia, muriendo en 1586. La imagen positiva de sí mismo que dejó a la posteridad, se debe en gran parte a que cuidaba mucho de su imagen y que tenía algo así como una oficina de prensa, gente que lo acompañaba permanentemente y describía por escrito sus logros. Lo sobrevivió Ana Jagellón, quien movió cielo y tierra para que, el hijo de su hermana, Segismundo Vasa, fuera elegido rey de Polonia por los nobles.


Ficha bibliográfica:
Paweł Jasienica: "La última del linaje" (Ostatnia z rodu)
Varsovia, Editorial Czytelnik, 1988
Idioma: Polaco

viernes, 18 de mayo de 2018

Los venenos en "La última del linaje" de Paweł Jasienica

El envenenamiento de Bona Sforza
representado por Jan Matejko
En la entrada anterior, hemos comentado la novela "Las hijas de Wawel" de Anna Brzezińska. En esa misma entrada tenemos la explicación de quién es quién en la trama de la historia, por lo que recomendamos al lector leerla antes de ésta, pues no nos repetiremos. Dijimos también que el tema de los venenos es un tema recurrente en la novela.
Para sopesar diferentes opiniones, comentaremos aquí lo que dice al respecto Paweł Jasienica en su libro "La última del linaje" (Ostatnia z rodu). 
Si bien Jasienica reitera que la mala imagen de la reina Bona la crearon los Habsburgo, mediante difamaciones pagadas con dinero contante y sonante, él mismo nos narra que el hijo de ésta, el rey Segismundo Augusto, fue con unos guantes negros puestos a un encuentro que tuvo con su madre, pues temía que ella le regalara algún anillo envenenado. Nos cuenta también que al próximo encuentro, el rey fue con un pañuelo blanco en la mano, con el que recibiría el anillo, en caso de darse las circunstancias. Que Segismundo Augusto, acusaba a su madre de haber envenenado a sus dos primeras esposas, Isabel de Habsburgo y Bárbara Radziwiłł, a quien amaba con devoción. Y que, por otro lado, el rey Esteban Batory se hizo traer un antídoto muy poderoso de parte del médico del príncipe elector de Brandenburgo por temor a que su esposa, Ana Jagellón, hija de Bona, como buena discípula de su madre, de quien habría aprendido sus malas artes, lo envenenara. 
Quien si murió envenenada fue la propia Bona. Le sirvió el veneno su propio médico, quien probaba los medicamentes delante de ella, antes de pasárselos, y quien se había preparado un antídoto para el caso. Quien le pagó por eso fue Gian Lorenzo Pappacoda, agente de los Habsburgo. Y fue el mismo agente quien le impidió salir de la habitación a buscar el antídoto. De tal manera que murieron ambos, Bona luego de tres días de terrible agonía y el médico, luego de agonizar durante una semana.

Ficha bibliográfica:
Paweł Jasienica: "La última del linaje" (Ostatnia z rodu)
Varsovia, Editorial Czytelnik, 1988
Idioma: Polaco